martes, 30 de junio de 2020

Granado

Nombre en euskara: Mingranondo  
Nombre científico: Punica granatum
Familia: Punicáceas

¡Granados en cielo azul!
¡Calle de marineros!
 ¡Qué verdes están los árboles,
 qué alegre tienes el cielo!».
   Juan Ramón Jiménez, Granados en el cielo azul

Este ejemplar se sitúa en el huerto de frutales de la Florida.

Es originario de la región que abarca desde Irán hasta el norte del Himalaya en la India; fue cultivado y naturalizado en toda la región del Mediterráneo desde la antigüedad. Se sabe de su cultivo desde hace al menos 5000 años.

El granado es un pequeño árbol muy ramoso, puede ser espinoso, que llega a alcanzar los 5 m. Tiene una corteza muy agrietada y nudosa en los ejemplares viejos.
Las hojas son caducas, algo coriáceas, simples y de forma entre lanceolada y oblonga.
Las flores son rojas, solitarias y muy vistosas. Al madurar forman un fruto comestible: la granada.
Muchos pueblos han visto la granada como un símbolo de amor, fertilidad y prosperidad. Según la mitología griega, el primer granado fue plantado por Afrodita, la diosa griega del amor y de la belleza.
Punica es el nombre que los romanos daban al árbol y sus frutos, y deriva de la ciudad de Cartago; granatum alude a los granos de su fruto.

martes, 9 de junio de 2020

Canciones de los árboles

…música que viene de árboles 
tañidos por el viento…
Al árbol le gusta entonar canciones
que el viento no recuerda.
    Adonis,  Homenaje al viento y a los árboles. 

La Fiesta europea de la Música se celebra cada año, el 21 de junio, a las puertas del verano. Es una celebración de la música que pretende valorar la diversidad de prácticas musicales, entre las que podríamos incluir las canciones de los árboles. Parece, por lo tanto, una buena ocasión para prestarles atención, y, para ello, nada mejor que las sugerencias que hacía el Archiduque Luis Salvador en su libro Canciones de los árboles.

Su modo de hablar y de cantar es distinto según sea la fuerza del viento y la edad de los árboles. Debemos escuchar atentamente el sonido de sus hojas y procurar descifrarlo: como un arpa suena la brisa en los laureles, el murmullo de los plátanos recuerda al barullo y los tumultos populares, el rumor de los chopos es alegre, como un baile infantil… Todo ello acompañado con los cantos de los pájaros que los frecuentan o el ritmo de la lluvia que cae sobre las ramas cubiertas de hojas.

Todo el mundo ha oído el susurro del viento entre la copa de los árboles. Sin embargo, no todos han llegado a escuchar sus voces, tan diversas según de qué árbol se trate; no todos han regalado el oído con sus canciones.
   Archiduque Luis Salvador. Canciones de los árboles