Nombre en euskara: Itsas pinu
Nombre científico: Pinus pinaster
¿Qué dicen los rumorosos,
en la costa enverdecida
al transparente rayo
de la plácida luz de luna?
¿Qué dicen las altas copas
de oscuro follaje arpado
con su bien acompasado
monótono zumbar?
Eduardo Pondal, Os
pinos
Este espléndido ejemplar se
encuentra en la finca de la Escuela de Educación Infantil Txikitxu.
Es una especie perenne, que habita en el entorno de la región mediterránea occidental. Tiene una copa irregular y abierta. Su tronco suele ser algo tortuoso, de color castaño oscuro por su gruesa corteza. Puede alcanzar los 40 m de altura.
Las acículas se
encuentran en pares, son gruesas y largas (12-22 cm), de color azul verdoso a
amarillo verdoso.
Las flores
comienzan a brotar a principios de la primavera. Las masculinas se forman en
grupos numerosos y van saliendo de una especie de espiga amarilla. Las
femeninas son unos conos rectos, en forma de pirámide.
Las piñas son
cónicas y grandes.
Se utiliza para
sujetar terrenos con graves procesos de erosión. Produce resina que se utiliza
para la elaboración de pegamentos, barnices, tintes, etc. Por destilación de la
resina se obtiene esencia de trementina, que es el verdadero aguarrás, de color
ambarino y más caro que los sustitutos que se comercializan como disolventes.
Como residuo al
quemar astillas resinosas, se obtiene la pez, una brea o alquitrán que aún se
utiliza para la impermeabilización de botas, cueros y barricas para el vino.
Antiguamente se usaba para el calafateado de los barcos de madera. Se calentaba
la pez, y se echaba en las uniones de los tablones introduciendo fibras
vegetales, como la estopa, de tal manera que al enfriarse se quedaban selladas
y se evitaban fugas de agua.
La propia
resina seca se vende para suavizar la fibra de los arcos de instrumentos de
cuerda como violines, violas y contrabajos.
Es curioso
observar cómo la palabra pino, o sus derivadas, es frecuentemente empleada en
la vida cotidiana en expresiones del tipo “como la copa de un pino”, “estar en
el quinto pino”, “estar a partir un piñón”, etc.
Es símbolo de
fuerza vital e inmortalidad, por su condición de perenne y por agarrarse
fuertemente, con sus raíces, en lugares de fuerte erosión.
Como todas las
coníferas, es anemófila, es decir, es polinizada por el viento.
Pinus era el nombre latino de los pinos; pinaster es un nombre latino que se asignaba a un pino silvestre
cuyo sufijo -aster denota
imperfección.
Fuentes
consultadas: